simplemente no nació para trabajar, al final siempre ha encontrado la forma de hacer trampa, saltarse los horarios porque no quiere demasiado dinero. por el contrario el cuñado trabaja muchísimo y de repente tienen cosas extrañas en el cuerpo como enfermedades y tonterías de esas.
ella se pregunta qué será lo mejor, mientras sigue soñando pegada a sus pinceles... Han pasado tantos años, busco reconocerme en alguno de ellos, buscar aquello que soñaba y que según yo era lo más consistente de mi personalidad.
me volví historiadora por un tiempo, me perdí dentro de los libros de Egipto y esas cosas, mi propio narcicismo de pensar que podía ser lo que yo quisiera, puedo ser una contadora me dije.
y he sido tan camaleónica que me cuesta trabajo regresar al mismo camino del principio, intentar poner las mismas muecas, encajar en las escalas, los gestos, las alturas. Me es difícil y a veces me siento como la más grande de las impostoras intentando piratearme a mi misma.... regreso a la cocina, ella sigue soñando con sus pinceles, yo me pregunto quien soy.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario