viernes, julio 25, 2008


hubo un día que no recuerdo bien la anomalía en el procedimiento pero colocaba mi trasero gentilmente sobre la pequeña silla plástica y un rugido de tela desgarrada me avisaba jubilosa que mi falda se había roto, mostrando gracias a dios a ningún ser viviente (pues me sentaba en la última fila) mi colorida ropa interior.. este suceso me dejó profundamente conmovida pues desde entonces cuando me sueño en el uniforme de la escuela y recuerdo que he crecido, seguramente muy a los lados, me entra el pánico que aquel ceñido tejido decida nuevamente liberarme de su cálido abrazo, con pánico a la falda, no no no me sueltes cuadritos azules y blancos, preferiría el leal uniforme de deportes, que aguantó estóico todo tipo de inclemencia juvenil... Cuando quitaron los uniformes si que sucedio una terrible tragedia, quede a expensas de mi propio gusto personal en ropa y de verdad que no existe nada mas trágico. Si al principio recuerdo la fasinación que sentía por los estampados setenteros de los camisetones que me legó mi abuelo y si si si, los llevé a la escuela portándolos con orgullo...
Nunca he sabido vestirme, lo reconozco, me gustan los pantalones bajo las faldas, las botas de invierno en los veranos, la ropa de anciano, los aretes tan pesados que te arrancan las orejas, el maquillaje de colores, los peinados ochenteros y todo lo mas antifemenino que pueda existir... tengo un odio jarocho a los tacones y a los shorts que permiten que se te rocen los muslos... odio las prendas delatoras como aquellas que se te ciñen con inclemencia para revelar sin pudor alguno que eres débil, que amas comer cochinadas...

2 comentarios:

susanitasaltacharcos dijo...

Me invitó a una cervecería, ah no, bar, es su nombre de caché en esta ciudad "de lujos" (voz de sarcasmo, ya sabes como)... así como estuve todo el día, con la camiseta de la mona en medio, mis converse rotos, los azulitos que han viajado más que ella, y mi gabardina rosa, para verme elegante... y así te vas a ir Glo? no hay problema, te da tiempo de cambiarte... yo no le veía por que, no así me voy... no te preocupes hay tiempo, aqui te espero... y la ví, con el escote hasta el ombligo, el pantalón entallado, zapatos de tacón, aretes más largos que su cuello, boca más roja que una fresa madura, y olorosa a un perfume nefasto que me hizo estornudar... el pelo lleno de muss y esponjadito perfecto, ninguna maraña, nada... No no te preocupes, así me iré, si quieres me siento lejos... no Glo, pero a ver si nos dejan entrar... :O maldita!!!!! y nos dejaron entrar... y ahí lo conocí... y ella se quedó esperando...

ni_mini dijo...

jajajajaja que experiencia mas familiar, solo que a mi si me dejaban fuera porque al final mi inconsciente acababa delatándome y olvidaba mi credencial de elector, seguro la escondía mientras dormía... no me gustan los antros jajajaja