domingo, octubre 07, 2012

aventuras



que las cosas nunca se olvidan aún cuando no se pueden recordar.
y simplemente mirar la plantita en la maceta de las bolitas de cerámica, le trae recuerdos sobre los detalles y lo que era abrir regalos de cumpleaños en la penumbra de los cielos oscuros de aquel remoto lugar. ¿Cuál ha sido el momento más feliz de tu vida? le preguntó una vez Gloria. Y solo puede pensar en instantes intrascendentes y pequeños. Es que me da vergüenza decirlo, porque no son épicos, no hay sangre ni risas exaltadas o lágrimas de felicidad. Esos dos momentos, el primer beso adolescente ahí en la acera de su casa. Y el día que se fue, en la ceremonia de la escuela, mirándola entre la gente, "siempre me han gustado tus ojos" le dijo. Así que recordando esos dos instantes se pregunta ¿en qué momento dejan de ser los sucesos cotidianos tan esencialmente puros que sin quererlo se vuelven algo épico?

2 comentarios:

10.21 dijo...

Hace poco pensaba en algo parecido...
http://theblatimes.tumblr.com/post/31974825671/embajada-rusa

Un abrazo, me caes bien.

gabilalara dijo...

que linda imagen.
y que lindo texto.
yo no entiendo el concepto de momento mas feliz de la vida.